Nos recibe la Fuente Pública, está amurallada, en la fachada se observa un escudo imperial de Carlos V y una inscripción que dice Encomienda Mayor de Castilla, se utilizaba hasta hace poco como abrevadero y lavadero de ropa.
Subiendo la empinada cuesta visitaremos la Iglesia de
santa María, asentada sobre una antigua
mezquita árabe, sobresale en su interior un magnifico artesonado y la torre
poligonal.
El Ayuntamiento, recientemente restaurado, es la casa solariega de Juan Muñoz de la Cueva del s. XVII, se conserva el pórtico principal.
La ermita de la
Virgen de los Remedios de estilo romano mudéjar, conserva una cúpula donde se
aprecian pinturas populares. Pasearemos por
las calles desiguales y angostas de esta población y podemos contemplar
desde el mismo el entorno que la bordea la vega, en ella se encuentran huertos
con bancales y albercas. Existen en su término 25 yacimientos y asentamientos
de interés arqueológico: villas romanas, fortalezas, enterramientos, norias,
etc.
Cuenta el pueblo con siete cuevas, cada una de ellas
con su leyenda. Algunas de ellas son visitables, pero antes hay que ponerse en
contacto con un guía para poder acceder a ellas.
Celebra sus fiestas del 7 al 9 de octubre en honor a
Ntra. Del Rosario. Otra fiesta muy peculiar es el Baile de Ánimas el 28 de
diciembre, donde hombres y mujeres pujan para bailar con la persona elegida.
San Gregorio, su patrón el 8 de mayo.
A unos 3 Km. del pueblo dirección a Puebla del
Príncipe, se encuentran los Baños de Brochales de aguas ferruginosas
medicinales.
Continuaremos el viaje adentrándonos en las frondosidades de la Sierra para llegar por la CR-632 a 8,2 km. a Puebla del Príncipe, situado en una de las laderas de Sierra Morena, donde termina la Mancha y empieza Andalucía. Entre los muros del Torreón y la Iglesia se creó este pueblo genuinamente manchego.
Continuaremos el viaje adentrándonos en las frondosidades de la Sierra para llegar por la CR-632 a 8,2 km. a Puebla del Príncipe, situado en una de las laderas de Sierra Morena, donde termina la Mancha y empieza Andalucía. Entre los muros del Torreón y la Iglesia se creó este pueblo genuinamente manchego.
La Iglesia de la Asunción, con su torre de almenas y grandes contrafuertes, más propio de un castillo que de una iglesia, de estilo gótico.
Entre el callejón de la iglesia y casas bajas está ubicado El Torreón-fortaleza reconstruido por los árabes en plena dominación musulmana, reconquistado por los cristianos en el s. XII para ser cedido por Alfonso VII a la Orden de Santiago, reconstruido en el año 2000, actualmente es un Centro Cultural. En la primera planta se encuentra una sala, antigua estancia del cuerpo de guardia. A la segunda se accede por una escalera de caracol, ambas salas tienen bóvedas en ladrillo de “nido de golondrina”. Muy cerca del Torreón y pegado ya a zona de huertos encontramos un lavadero, restaurado, que en su día servía de fuente y de aljibe para regar los huertos, así como de lavadero de ropas. Tiene una plaza acogedora, en la que poder descansar y reponer fuerzas para continuar con la Jornada.
A 2,5 km. del sur de la localidad, al pie de las
agrestes cumbres está la Ermita de la Virgen de Mairena, levantada por los
visigodos patrona de este pueblo y del pueblo vecino de Villamanrique,
enclavada en un reducido y fértil valle, a sus pies una fuente de agua
cristalina.
La
virgen permanece todo el año en Puebla del Príncipe, hasta el primer domingo de
mayo, que es portada en andas desde Puebla del Príncipe a Villamanrique,
permaneciendo en este pueblo hasta el primer domingo de junio, que se traslada
la imagen de Nuestra Señora de Mairena portada en andas por los devotos de
Villamanrique desde su Iglesia hasta el límite del término municipal de Puebla
del Príncipe, donde se produce el intercambio en el lugar conocido como las
"Quebradas". Se entonan cantos a la virgen tras los cuales los
poblatos toman la imagen y se encaminan hacia Puebla del Príncipe. Celebra su fiestas patronales del
6 al 9 de septiembre.
A 7 km. de Puebla del Príncipe por la carretera CM 3202 está Villamanrique. En ambos pueblos se puede ver grandes rebaños de ganado vacuno pastando en sus términos.
Villamanrique enclavado a los pies de una sierra llamada de San Cristóbal, situado en un paso natural entre la meseta y el valle del Guadalquivir y dominando el ancho y fértil valle regado por el río Guadalén.
Podemos ver la Iglesia de San Andrés, declarada Monumento Nacional, de estilo gótico tardío, con una bella portada plateresca, destacando el conjunto escultórico del maestro cantero Juan de Arama, con un gran valor estético y simbólico debido a los motivos decorativos y la iconografía que presenta. En su fachada se ven unos balconcillos, como en la iglesia de La Solana y Villahermosa. Con una esbelta torre, de sección octogonal en la parte superior que se accede a ella por una escalera de caracol de piedra labrada.
Continuaremos paseando por la calle Jerónimo Frías, en la que se puede contemplar algunas casas solariegas y el antiguo convento del Cister, del que solo se conserva la fachada labrada en piedra y la cruz de dicha Orden. Siguiendo la calle se encuentra la plaza del Ayuntamiento, otras casas solariegas, de las que solo queda algunos blasones.
Próximo a la Casa Consistorial se halla La Casa de la Encomienda o Casa del Comendador de Montizón del poeta Jorge Manrique, muy deteriorada. Posee dicha casa un patio columnado y galerías con balaustres de madera.
Villamanrique cuenta con bellos parajes naturales, idóneos para la práctica del senderismo y el contacto con la naturaleza. Al oeste, tomando un camino rural que une Villamanrique con Torre de Juan Abad,en un paisaje de gran belleza configurado por la hoz que forma el río Guadalén alrededor de la gran roca está el castillo de Montizón.
Declarado
Monumento Histórico Artístico, considerado Bien de Interés Cultural (BIC). Es
la fortaleza, mejor conservada del Campo de Montiel, es de propiedad privada,
está en uso y parcialmente restaurado. Se puede acceder concertando una visita
previa, aunque por ser BIC debería de estar abierto determinados días al año.
Es un castillo de fuertes y gruesos
muros construido por la Orden de Santiago. Fue cabecera de la Encomienda de Montizón.
Las
dependencias que se conservan son la puerta del castillo formada por un arco
apuntado labrado en piedra de sillería, la torre del homenaje desde donde se
divisa el río Guadalén, el patio de armas, las caballerizas, el algibe y diversos recintos. Aquí vivió
Jorge Manrique con su esposa doña Guiomar de Castañeda y sus hijos. En la
tranquilidad de estas tierras escribió algunas de sus obras como “Castillo de
amor”, en donde se reconoce el castillo de Montizón y el río Guadalén que pasa a sus pies, haciendo un
paralelismo entre el castillo y su amada.
La fortaleza nombrada
está'n los altos alcores
d'una cuesta
sobre vna peña tajada,
maçiça toda d'amores,
muy bien puesta,
y tiene dos baluartes
20 hazia el cabo c'a sentido
ell oluidar,
y cerca a las otras partes
vn río mucho crecido
qu'es membrar...
...El muro tiene d'amor
las almenas de lealtad,
la barrera
qual nunca tuuo amador,
ni menos la voluntad
de tal manera;la puerta d'un tal
desseo
que, aunqu'esté del todo entrada
y encendida,
si presupongo c'os veo,
luego la tengo cobrada
y socorrida
La fortaleza nombrada
esta en los altos alcores
de una mesta,
sobre una peña tejada,
maciza toda de amores,
muy bien puesta:
y tiene los baluartes
hacia el cabo que ha sentido
el olvidar,
y cerca de las otras partes,
un río muy crecido,
que es nombrar.
Otro lugar a resaltar en su término, en un cruce de caminos tomando la carretera de Villamanrique a Montizón, casi en el límite con la provincia de Jaén se encuentra la Venta Nueva del S. XVI, punto de confluencia de los caminos reales de Andalucía a Valencia (Vereda de los Serranos), fue mandada construir por el duque de Medinasidonia como punto de descanso para los viajeros. Cosme de Medicis en su viaje a España, se albergó en ella y su acuarelista Baldi la ilustró para memoria de siempre.
Algunos cervantistas identifican esta venta el
lugar donde Sancho Panza llegó para llevar la carta a Dulcinea y donde se le
manteó.
Saliendo por la carretera que nos lleva al pueblo
de Montizón, tras dejar la ermita de San
Cristóbal, se halla los Baños de Perete, manantial de agua mineral.
De vuelta a Villamanrique, se coge la carretera CM 3129 en dirección a Torre de Juan Abad,
que dista 7 km., encontraremos sobre un cerro restos de una antigua fortaleza
conocida como el castillo de Eznavejor, de origen islámico. A 2 km. llegamos al
señorío de Torre de Juan Abad,
enclave de los más antiguos de la Orden de Santiago. Su origen se vincula al
anterior castillo mencionado. A lo largo del s. XV sufrió diversas
destrucciones provocadas por los recelos de los Manrique, comendadores de
Montizón, deseosos de someter el término a su jurisdicción.
Cuenta Torre de Juan Abad con dos plazas, la plaza del
Parador, donde está una bella escultura en bronce dedicada al ilustre escritor
don Francisco de Quevedo, obra del artista manchego Joaquín García Donaire.
La Plaza del Ayuntamiento donde está La Casa de la Tercia con soportales, donde se guardaba el pan de la Mesa Maestral, de piedra labrada.
Si me hallo, preguntáis,
en este dulce retiro,
y es aquí donde me hallo,
pues andaba allí perdido.
Aquí me sobran los días,
y los años fugitivos
parece que en estas tierras
entretienen el camino.
en este dulce retiro,
y es aquí donde me hallo,
pues andaba allí perdido.
Aquí me sobran los días,
y los años fugitivos
parece que en estas tierras
entretienen el camino.
Se conserva su
tintero de cerámica talaverana y el sillón donde se sentaba.
Cuenta con dos salas de exposiciones y otra dedicada a Quevedo, en ella se muestran documentos históricos como su Testamento, en ella se ha ubicado el Centro de Estudios Quevedianos con una magnifica biblioteca especializada en el escritor y el Siglo de Oro español. Este museo alberga también en una sala el Museo del Detective, que cuenta con el primer polígrafo utilizado en España.
Cuenta con dos salas de exposiciones y otra dedicada a Quevedo, en ella se muestran documentos históricos como su Testamento, en ella se ha ubicado el Centro de Estudios Quevedianos con una magnifica biblioteca especializada en el escritor y el Siglo de Oro español. Este museo alberga también en una sala el Museo del Detective, que cuenta con el primer polígrafo utilizado en España.
Subiendo por la calle Empedrada iremos a la Iglesia de
Nuestra Sra. de los Olmos, destaca su Retablo Mayor en madera tallada y
policromada de finales del s. XVI, obra de Francisco Cano. El Órgano Histórico
de Gaspar de la Redonda Zeballos, muy bien conservado, con caja de madera de
ébano dorada y policromada, donde se celebran Conciertos de Música a lo largo
del año.
Torre de Juan Abad, junto con Terrinches y Villahermosa realizan un Festival Internacional de Conciertos bajo el nombre de Sonoridades.
Torre de Juan Abad, junto con Terrinches y Villahermosa realizan un Festival Internacional de Conciertos bajo el nombre de Sonoridades.
A unos 4 km del pueblo está la Ermita de la Virgen de
la Vega, rodeada por un claustro. Su origen data del s. XIII, construida por
los Templarios, como lo atestigua una inscripción, para proteger a los peregrinos que iban a los Santos
Lugares.
Siendo visitado incluso por Santa Teresa de Jesús. En este paraje se celebra la romería en honor a la virgen el 15 de agosto y las fiestas patronales del 7 al 10 de septiembre.
Siendo visitado incluso por Santa Teresa de Jesús. En este paraje se celebra la romería en honor a la virgen el 15 de agosto y las fiestas patronales del 7 al 10 de septiembre.
A 8 km. por la CM
3219 desde Torre de Juan Abad nos encontramos con Cózar, aquí podemos desviarnos por la
carretera CR-624 dirección Valdepeñas, para poder visitar:
El Pantano de la Cabezuela y las Bodegas Real en la Finca de Mari Sánchez, situados ambos en el histórico y antiguo Campo de Montiel. En ambos sitios hay Restaurante, y se conciertan visitas para conocer la Bodega Real.
El Pantano de la Cabezuela y las Bodegas Real en la Finca de Mari Sánchez, situados ambos en el histórico y antiguo Campo de Montiel. En ambos sitios hay Restaurante, y se conciertan visitas para conocer la Bodega Real.
De sus tres portadas, la más interesante es la principal, clasicista, realizada en el siglo XVII con escenas del Calvario. Junto a la iglesia se encuentra la Plaza, el Ayuntamiento y la Ermita del santo Cristo de la Vera Cruz, de gran valor sentimental para los cozareños.
Se celebran las fiestas el 14 de septiembre y durante
las fiestas hay un juego llamado “Las tacillas” duran 5 días, cuyos orígenes se
remontan al s. XIV y XV.
Se practica entre los días 13 al 17 de septiembre, coincidiendo con las fiestas en honor al Santísimo Cristo de la Vera Cruz. Se conservan dos tacillas (concavidad en el suelo con unas ranuras a modo de asa), en la parte trasera de la Ermita del Cristo. EL Juego consiste en dejar caer 8 bolas a la tacilla, si el número de bolas que caen en el interior de ella es par, gana la banca, si es impar, ganan los apostantes. Son subastadas públicamente el día que comienzan las fiestas y el dinero recaudado es destinado a la cofradía del Cristo para el mantenimiento de su ermita. Tiene unas sencilla reglas que han sido heredadas de generación en generación. En este pueblo hay un Centro Hípico llamado Yeguada El Azafranar, por el camino de Alcubillas a un 1 Km. del pueblo los que compartan la afición al caballo y a la naturaleza podrán disfrutar de actividades ecuestres.
Se practica entre los días 13 al 17 de septiembre, coincidiendo con las fiestas en honor al Santísimo Cristo de la Vera Cruz. Se conservan dos tacillas (concavidad en el suelo con unas ranuras a modo de asa), en la parte trasera de la Ermita del Cristo. EL Juego consiste en dejar caer 8 bolas a la tacilla, si el número de bolas que caen en el interior de ella es par, gana la banca, si es impar, ganan los apostantes. Son subastadas públicamente el día que comienzan las fiestas y el dinero recaudado es destinado a la cofradía del Cristo para el mantenimiento de su ermita. Tiene unas sencilla reglas que han sido heredadas de generación en generación. En este pueblo hay un Centro Hípico llamado Yeguada El Azafranar, por el camino de Alcubillas a un 1 Km. del pueblo los que compartan la afición al caballo y a la naturaleza podrán disfrutar de actividades ecuestres.
Una jornada al sur del Campo de Montiel, donde hemos
visto fortalezas, ríos, museos, casas señoriales, paisajes naturales, y una
visita muy de moda hoy en día como son las bodegas. A 10 km. de Cózar se
encuentra Infantes, volvemos al lugar
en la misma dirección, aunque por caminos diferentes, que don Quijote cuando volvió a su pueblo en
la segunda salida de la Primera Parte. Nuestro héroe se internó en lo más profundo de Sierra Morena buscando escapar a la acción
de la justicia, para regresar de nuevo días después a la venta de Maritornes
con motivo del engaño urdido por el cura
para recoger a don Quijote y traerlo a su pueblo. Obligatoriamente tuvo que
recorrer parte de este último trayecto desde Sierra Morena- Castellar de
Santiago donde se encuentra la Sierra del Cambrón- Torre de Juan Abad-
Villanueva de los Infantes- por el Campo de Montiel para volver a su pueblo.
Pisó
por ella el uno y otro lado
de la gran Sierra Negra, y el famoso
Campo de Montiel,….
( El Quijote, Cap. LII, I Parte)
de la gran Sierra Negra, y el famoso
Campo de Montiel,….
( El Quijote, Cap. LII, I Parte)
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